Mi papá estudiando la preparatoria
Desde pequeña veía a mi papá y sabía que era un hombre con poderes y que era tan espectacular que cualquier cosa que hiciera era increíble.
Para una niña era grandioso ver que tu papá lo podía todo, y empezaba una aventura nueva al pasarla con él.
Pasaban los años y yo iba creciendo, mis sentidos incrementaban, mi percepción sobre las situaciones que ocurrían eran más claras cada vez. Mi padre seguía siendo fuerte e increíble, mas sin embargo, tenía debilidades, errores, tropiezos que yo de pequeña no veía. Pasé a mi juventud y me daba cuenta que él había dejado atrás muchas metas en sus años de joven, tenía planes, proyectos que simplemente no se concluyeron. Uno de esos planes siempre fue terminar la preparatoria, tener una carrera Universitaria, un excelente trabajo y poder dar más a si mismo.
Años mas tarde me di cuenta que mi hermano y yo ya empezábamos la Licenciatura, entonces empezamos a motivar a mi papá a que diera un gran paso en su vida, y pudiera de nuevo empezar a estudiar la Preparatoria.
Por sus ocupaciones lo que mejor se le acomodó fue una escuela que su modalidad fuera en línea y en corto tiempo.
El sigue en el curso, pasa las noches y tardes estudiando para poder crecer el mismo en lo que dejó inconcluso años atrás.
Para mi sigue siendo el hombre increíble, más aún con sus errores, porque me doy cuenta que a pesar de todo, siempre intenta ser mejor.
Autor: Miryam Nieto
Adultos en la preparatoria
¿Así que va a estudiar la preparatoria como un adulto? ¡Bien por usted!
Aún siendo usted un adulto puede estar seguro que iniciar sus estudios le beneficiará ya que usted podrá desarrollar su potencial; mejorará su empleabilidad y a su vez obtendrá nuevos conocimientos.
Sabemos que junto con su entusiasmo viene un poco de miedo pues han pasado ya unos años desde que acudió a una aula. ¡No tema a los exámenes!
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